Pueblo pequeño y remoto, Esquel está rodeado de lugares naturales únicos y poco explorados.
Vas a enamorarte del Parque Nacional Los Alerces, con su bosque silencioso y lagos de colores inexplicables.
La experiencia obligatoria es sin dudas el paseo sobre el tren patagonico “Trochita”, que recrea el recorrido de los antiguos pobladores.
Un lugar de donde vas a volver maravilladx y reconectadx con vos mismx.